El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) es una Agencia Estatal para la investigación científica y el desarrollo tecnológico, con personalidad jurídica diferenciada, patrimonio y tesorería propios, autonomía funcional y de gestión, plena capacidad jurídica de obrar y de duración indefinida. (art. 1 Estatuto)
Órganos de asesoramiento y apoyo
La Ley 9/2917 de Contratos del Sector Público, en su artículo 63 establece la obligación de publicar el Perfil de contratante. El perfil de contratante de la Agencia Estatal CSIC agrupa la información y documentos relativos a su actividad contractual al objeto de asegurar la transparencia y el acceso público a los mismos
El CSIC es un organismo que se encuentra incluido dentro del ámbito subjetivo de aplicación de la ley 19/2013 de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno (LTAIPBG).
El Comité de Ética del CSIC
Integridad científica y buenas prácticas
Ética en la investigación
El CSIC es un organismo público que actúa generalmente como responsable de tratamiento de datos de carácter personal por lo que le corresponde, siguiendo el principio de responsabilidad proactiva, atender las obligaciones que establece el Reglamento General de Protección de Datos y la Ley 3/2018 de 5 de diciembre, de Protección de Datos de Carácter Personal y garantía de los derechos digitales.
La investigación en el CSIC se estructura en tres grandes áreas, SOCIEDAD, VIDA Y MATERIA, que cubren la mayor parte del conocimiento humano y en las que se encuadra la actividad de más de 1.500 grupos de investigación de sus 120 centros.
El CSIC desarrolla su actividad de investigación científica y técnica principalmente a través de sus institutos de investigación, que se organizan en departamentos y en los que se integran los grupos de investigación.
Los Grupos de investigación constituyen la unidad fundamental, de carácter específico, que contribuye a la consecución de los objetivos científicos de la institución.
Personal Investigador del CSIC en activo
Los científicos y tecnólogos del CSIC compiten por financiación en convocatorias de agencias financiadoras públicas y de entidades privadas externas al CSIC
Catálogo de servicios científico-técnico
El CSIC, a lo largo de su existencia, ha proporcionado diferentes servicios científico-técnicos, lo que ha convertido a algunos de sus centros en referentes. Asimismo, actualmente, su Estatuto como Agencia Estatal indica como una de sus funciones principales la de ofrecer servicios científico-técnicos a la Administración General del Estado así como a otras Administraciones e Instituciones públicas y privadas.
El presente Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia incorpora una importante agenda de inversiones y reformas estructurales, que se interrelacionan y retroalimentan para lograr cuatro objetivos transversales: avanzar hacia un país más verde, más digital, más cohesionado desde el punto de vista social y territorial, y más igualitario.
El Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) es uno de los principales instrumentos financieros de la política de cohesión europea. Su objetivo es contribuir a reducir las diferencias entre los niveles de desarrollo de las regiones europeas y mejorar el nivel de vida en las regiones menos favorecidas.
Alianzas en la colaboración científica para una misión social y soluciones del mañana.
La vigente Ley de la Ciencia tiene como objetivo general el “promover la inclusión de la perspectiva de género como categoría transversal en la ciencia, la tecnología y la innovación, así como una presencia equilibrada de mujeres y hombres en todos los ámbitos del Sistema Español de Ciencia, Tecnología e Innovación. (art.2 de la Ley 14/2011, de 1 de junio, de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación).
Dentro de las posibilidades de colaboración del CSIC con otros agentes de I+D+i se encuentra la figura de las Unidades Asociadas como fórmula que permite articular de forma temporal y flexible colaboraciones estrictamente científicas entre el personal investigador del CSIC y el de entidades externas que se integre en dichas unidades.
Otras Infraestructuras de apoyo a la Investigación
Grandes Instalaciones e Infraestructuras Científico-Tecnológicas Europeas
Infraestructuras Científicas y Técnicas Singulares (ICTS)
Acercando las tecnologías y el conocimiento del CSIC a todos los sectores de la sociedad.
Uniendo esfuerzos en materia de I+D+i.
Estableciendo y estrechando relaciones con el sector empresarial.
Ejemplos reales de cómo en el CSIC generamos valor llevando los resultados de investigación a la sociedad.
Novedades y planes para impulsar la economía del conocimiento.
Estamos disponibles para ampliar información y contestar a cualquier duda.
En un entorno científico internacional cada vez más competitivo, la ambición del CSIC es mejorar su posicionamiento a través del refuerzo de la dimensión internacional de su producción científica. Este es el principal motivo que hace que las relaciones del CSIC con otras entidades de investigación internacionales sean un punto esencial para su avance.
Las relaciones Internacionales del CSIC, entendidas como tales aquellas acciones orientadas a dirigir, planificar e impulsar las relaciones internacionales en el ámbito europeo e internacional; dirigir la planificación, coordinación y seguimiento de la participación del CSIC en convocatorias competitivas y en la cogestión de programas en el ámbito europeo e internacional, y dirigir la gestión de contratos con organismos internacionales, se coordinan a través de la Vicepresidencia de Relaciones Internacionales (VRI) de CSIC.
Horizonte 2020 es el octavo Programa Marco para la Investigación y la Innovación en la Unión Europea para el periodo 2014-2020. Cuenta con un presupuesto de más de 70.000M€ para financiar iniciativas y proyectos de investigación, desarrollo tecnológico, demostración e innovación de claro valor añadido europeo.
Los principales instrumentos para el desarrollo y atracción de talento a la Unión Europea (UE) son las Acciones Marie Skłodowska-Curie (MSCA) y las convocatorias del Consejo Europeo de Investigación (ERC).
Otros Programas Europeos e Internacionales
El papel del CSIC en la articulación del Espacio Europeo de Investigación se expresa no sólo a través de la participación en convocatorias periódicas de Horizonte 2020, sino también mediante la participación en otras convocatorias comunitarias, financiadas a través del Programa Marco o de otros Programas, que por su relevancia estratégica para el CSIC merecen una mención especial.
Cooperación y Recursos Internacionales
Dentro del fomento de la internacionalización, desde la Vicepresidencia de Relaciones Internacionales (VRI) se realizan actividades de divulgación de oportunidades y se da soporte a nuestros investigadores en convocatorias competitivas de terceros países.
Desde la Vicepresidencia de Relaciones Internacionales (VRI) se gestionan y tramitan los convenios de colaboración con instituciones de terceros países. En la actualidad las relaciones con nuestros homólogos de otros países se canalizan principalmente a través de la organización de actividades formativas tipo workshop.
European Strategy Forum on Research Infraestructures (ESFRI)
En el CSIC nos gusta la ciencia y también compartirla. Por eso ponemos en marcha un gran número de iniciativas de divulgación, educación y ciencia ciudadana. Nuestro objetivo es fomentar la cultura científica y hacer la ciencia más accesible para todo el mundo.
Editorial CSIC dispone de un extenso catálogo de reconocido prestigio académico, compuesto por más de 2.500 títulos de monografías organizados en 75 colecciones, y 37 revistas científicas.
Editorial CSIC incluye también en este catálogo una cuidada selección de obras fuera de colección.
Histórico de iniciativas de divulgación
Museos y espacios para la divulgación
El CSIC cuenta con varios centros de referencia para la divulgación de la ciencia ubicados en las principales ciudades españolas. Exposiciones, talleres, conferencias y otras actividades para todos los públicos forman parte de la programación habitual de estos espacios.
Más de un centenar de publicaciones en las que especialistas del CSIC de todas las áreas del conocimiento acercan a la ciudadanía, de forma clara y rigurosa, temas científicos de interés público.
Red de cultura científica y ciencia ciudadana
En los centros y delegaciones del CSIC existen unidades que trabajan en el fomento de la cultura científica y la ciencia ciudadana. Un mapa permite localizar su ubicación y acceder a sus datos de contacto.
La ciencia no tiene por qué estar hecha solo por profesionales. Participa en la investigación científica compartiendo recursos, recopilando datos y ayudando a analizarlos.
Didáctica de la ciencia
Los centros, unidades y proyectos de investigación del CSIC acercan la ciencia y la tecnología a estudiantes y profesorado de distintos niveles educativos a través de diversos programas e iniciativas.
Políticas y estrategias de cultura científica
El CSIC organiza cursos y encuentros de formación para personas interesadas en la divulgación de la ciencia, elabora documentos encaminados a promover la cultura científica y participa en proyectos e iniciativas destinadas a evaluar el impacto de la comunicación social de la ciencia.
En el CSIC sabemos que el principal activo con el contamos para desarrollar nuestra misión son las personas. Su capacidad, formación y profesionalidad son las que imprimen al CSIC sus señas de identidad.
¿Por qué formar parte del CSIC?
El CSIC es una entidad de investigación singular en España, que la sociedad reconoce y valora. A la diversidad temática de su actividad investigadora y a sus amplios recursos humanos se une su presencia geográfica, extendida por todo el territorio nacional y sus infraestructuras singulares.
Alrededor de 11.000 personas trabajan e investigan en el CSIC, en torno al 25% son investigadores en formación que realizan su doctorado y continúan su carrera centrados en la etapa postdoctoral y mediante la dirección de grupos de investigación y proyectos.
La Bolsa de Empleo del CSIC es el mecanismo de selección para acceder a puestos de trabajo temporal vinculados a proyectos de investigación, convenios y contratos.
Puede consultar toda la información relativa a las convocatorias específicas de empleo fijo y temporal del CSIC y de otras convocatorias específicas, así como de las de provisión de puestos de trabajo por personal funcionario mediante el sistema de libre designación, de promoción interna y de los concursos de traslados de personal funcionario y laboral.
Formación de Personal Investigador
El Departamento de Postgrado y Especialización (DPE) del CSIC, contribuye a definir y llevar a la práctica la política del CSIC en materia de formación de investigadores y de la docencia que imparten nuestros investigadores.
Cursos de Especialización y Alta Especialización de CSIC
El programa de Cursos de Especialización comprende todas las enseñanzas que los investigadores del CSIC ofrecen en forma de cursos de posgrado dirigidos a graduados, licenciados, ingenieros, arquitectos, etc.
Estrategia de Recursos Humanos para Investigadores (HRS4R)
El CSIC está desarrollando la Estrategia de Recursos Humanos para Investigadores para alcanzar el pleno cumplimiento de la Carta Europea del Investigador y el Código de Conducta para la Contratación de Investigadores y obtener el reconocimiento HR EXCELLENCE IN RESEARCH.
Hidrógeno, helio, litio, berilio, boro, carbono. En una clase cualquiera de física y química de cualquier instituto de educación secundaria, toca aprenderse la tabla periódica. Los veinte primeros elementos, luego por columnas. Si el profesor o profesora no es especialmente exigente, perdonará dos filas que quedan arrinconadas fuera de la tabla. En una de ellas se agrupan la mayoría de las conocidas como tierras raras. Un tipo de metales a los que se les quedó la coletilla de raros no porque sean particularmente difíciles de hallar en la naturaleza, sino por lo excepcional de encontrarlos de manera pura: suelen estar incrustados en minerales. Hasta mediados del siglo XX no se les prestó mucha atención, igual que en las clases del instituto; pero en el XXI, son elementos cruciales para el orden mundial.
Las tierras raras se usan actualmente para construir baterías, armas, pantallas, en radiodiagnóstico. Lo que los volvió esenciales fue el descubrimiento de sus increíbles propiedades magnéticas. De la fórmula que combina una de esas tierras raras, el neodimio, con el hierro y con el boro, sale el imán más potente que ha inventado el ser humano fuera de laboratorio. NdFeB, un superimán que desarrolló General Motors en 1982. Puede llegar a emitir hasta diez veces más energía magnética que los imanes de ferritas, como se llama a los que están basados en óxido de hierro mezclado con bario o con estroncio, y que han sido durante décadas los más empleados en fabricación.
Con los imanes se puede almacenar, convertir y producir energía eléctrica y mecánica. Si son superimanes, se puede hacer en grandes cantidades. Así que los usos de los imanes de neodimio-hierro-boro en el mundo moderno son todos los que podamos imaginar. Los tenemos en los motores con los que transportamos cargas enormes. En elementos del presente y futuro como las turbinas eólicas de los molinos de viento y los coches eléctricos; en imagen médica; en ordenadores y teléfonos móviles; en las lavadoras. Están por todas partes.
El proyecto Amphibian trabaja en la mejora de los imanes de ferritas tradicionales, más asequibles y sostenibles que los ubicuos superimanes de neodimio
Y aquí entra la geopolítica. En primer lugar, la extracción de las tierras raras implica una gran paradoja, teniendo en cuenta que se usan en un proceso que forma parte de la generación de productos de energía limpia: suele conllevar altos niveles de contaminación ambiental porque libera materiales radioactivos. En segundo lugar, alrededor del 40% de las reservas conocidas de tierras raras están en China. Para hacerse una idea, los dos siguientes países del ranking, Vietnam y Brasil, poseen cada uno aproximadamente la mitad de cantidad. China controla además, no sólo las reservas, sino el 80% de la producción de tierras raras. Cuando le ha convenido, el gigante asiático ha cerrado el grifo de las tierras raras; o ha multiplicado sus cuotas de exportación por cuatro. La Unión Europea (UE) importa desde China el 98% del neodimio que necesita, datos parecidos a los de Reino Unido. En todo EEUU solo se conoce una mina de este metal, que además ha tenido que ser cerrada varias veces.
Por eso el neodimio está junto a las otras 16 tierras raras en la lista de “materias primas críticas” que elabora la UE. Una lista de elementos que aúnan varias condiciones que, juntas, son fatales: difíciles de conseguir, poco sostenibles, que vuelven al continente muy dependiente del exterior… y también ultranecesarios para el desarrollo tecnológico e industrial.
Centenares de proyectos políticos y científicos intentan desde hace tiempo buscar alternativas a esta gran dependencia de China. Uno de ellos lo coordinó el Consejo Superior de Investigaciones Científicas entre once socios europeos (provenientes de Noruega, Dinamarca, Eslovenia, Alemania e Italia), desde enero de 2017 hasta diciembre de 2019. Con un presupuesto de 4,9 millones de euros provenientes de la UE. Es el proyecto Amphibian.
Algunas vías alternativas al neodimio que se exploran consisten en reciclar o reducir sus cantidades en los productos derivados. Pero lo que intenta Amphibian es sustituirlo en esos productos por otros materiales: por imanes de ferritas, de óxidos de hierro. Los que son, recordemos, mucho menos potentes: el campo magnético resultante de los de neodimio puede llegar a 1,2 Tesla; el creado por ferritas, a 0,4.
El proyecto Amphibian está intentando reemplazar el neodimio con otros materiales. / Álvaro Muñoz Guzmán
Pero tienen otras comparaciones más ventajosas, que tienen en cuenta en Amphibian: el precio de un kilo de ferritas ronda los 1,5 euros; el de un kilo de neodimio magnético, oscila una horquilla entre 60 y 100. Sus minas son mucho más accesibles alrededor del planeta y su extracción es menos contaminante. Además, el neodimio está tan normalizado que en algunas aplicaciones cotidianas que realmente no requerirían de tanta potencia magnética, emplearlo equivale a “matar moscas a cañonazos”, resume el director de Amphibian, Adrián Quesada, investigador en el Instituto de Cerámica y Vidrio (ICV-CSIC). Así que lo inteligente es no recurrir a ello, si es posible.
¿Cómo y dónde llevar a cabo entonces la sustitución de un superimán por un imán normalito? Lo primero que se propusieron en Amphibian fue mejorar esos imanes normalitos: conseguir imanes de ferritas capaces de alcanzar campos magnéticos de 0,5 tesla, por encima del 0,4 de los habituales. “Normalmente contienen solo ferrita y tienen un rendimiento máximo posible. Lo que hacemos es añadirle otro material magnético para aumentar ese rendimiento. Las ferritas presentan tantas ventajas con respecto de los imanes de tierras raras que hacen que incluso mejoras del 20% conllevan que merezca la pena estudiar una posible sustitución”, indica Quesada. El método inicial: “Probamos a mezclar partículas metálicas esféricas, pero eso no mejoraba las propiedades”. Por el tamaño y sobre todo por la forma: que se tratase de esferas grandes hacía que las líneas de campo magnético tuviesen más espacio para cerrarse, y por tanto el conjunto se desimantara. Un rompecabezas, hasta que todo encajó: lo que añadieron finalmente, dispersados, fueron nanohilos de hierro cobalto. “Esa suma sí se comporta como un imán mejorado y robusto”.
Los imanes de neodimio-hierro-boro se aplican en motores, turbinas eólicas y coches eléctricos; en imagen médica, ordenadores y teléfonos móviles
Eso es el cómo. ¿Y el dónde? De momento, del proyecto han salido dos patentes. Una, los imanes de ferrita con nanohilos incrustados. Otra, su aplicación práctica: volantes de inercia en los que se mezclan los de imanes de ferrita mejorados, con imanes de neodimio. Es decir, siguen necesitando de tierras raras, pero en mucha menor cantidad. “La imagen que tenemos de los volantes de inercia son los anillos que se utilizaban en los castillos, los que levantaban las puertas enrollando cuerdas a su alrededor”, ilustra Quesada. En el año 2022, esos volantes de inercia son discos de hierro que levitan magnéticamente y que, rotando a mucha velocidad, funcionan como una especie de baterías que sirven para almacenar energía y para suministrarla de manera muy rápida. Se pueden emplear para almacenar energía generada en turbinas eólicas o paneles solares. Los volantes de inercia desarrollados en Amphibian están siendo comercializados por Wattsup Power en Dinamarca, y consiguen hacer levitar al disco metálico usando solo 0,8 Tesla, en lugar de los 1,2 Tesla que usaban con anterioridad.
Por ahora, el problema de los imanes de ferrita mejorados es que “es muy sofisticado, y por lo tanto caro, producir los nanohilos” para que tengan utilidad por sí solos. Por ahí va la continuación de la investigación de Amphibian: “El ritmo inicial en 2019 era de miligramos por semana. Actualmente estamos trabajando, en colaboración con la Universidad Complutense de Madrid, en producir gramos por semana. Todavía no lo suficiente para hacer un producto comercial, para el cual se necesitan kilos por semana”. Siguen en ello porque la investigación del siglo XXI pasa por, conjuntamente, como ha trabajado Amphibian, encontrar alternativas a la extracción contaminante y a los monopolios geoestratégicos.
Belén Remacha / CSIC Comunicación
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